![]() |
Dibujo sacado de internet. |
La mamá de Pitusín ha sacado del armario
el disfraz del pequeñín para poder presumir,
igual que el año pasado, en las fiestas de su barrio.
¡Este disfraz ha encogido! O ¿es que mi niño ha crecido?
¿Qué le pongo yo al chaval
para que cante y que baile al ritmo del carnaval?
La tía de Pitusín otro disfraz le ha comprado:
un precioso cocodrilo que le recuerda a Cirilo;
con una boca tan grande y unos dientes tan enormes
que el niño al verle, del susto, se queda paralizado.
¡Pues yo no me pongo eso!
¿Y si le toco y me muerde?
Una boca tan enorme no parece de fiar.
A mí me da mucho miedo que se pueda equivocar
y piense que soy un pollo o cualquier otro manjar.
El niño, con mucho miedo, ha empezado a sollozar
y ha dicho muy enfadado que, por de pronto,
este año, no se piensa disfrazar.