Mensaje de bienvenida

¡Y sin embargo algunas personas dicen que se aburren!¡ Démosles libros!¡Démosles fábulas que los estimulen!¡Démosles cuentos de hadas! Jostein Gaarder

jueves, 13 de septiembre de 2012

Mi pequeño homenaje a Roald Dahl


Queridos amigos, estoy intentando  escribir algún comentario sobre Roald Dahl en el día de su nacimiento y  me doy cuenta de que no puedo decir nada sobre este magnífico escritor que no se sepa; por eso voy a contaros cómo  he aprendido a quererlo y gracias a quién ha sido.

Carátula de la película.
Cuando yo era una niña leía  muchos tebeos y cuentos de hadas  de la colección Azucena,  pero sobre todo estaban de moda los cuentos de Charles Perrault , de Hans Christian Andersen, de los hermanos Grimm  y de Julio Verne, sin embargo, no pude leer  de pequeña  el maravilloso libro de Matilda o  Charlie y la fábrica de chocolate. Yo primero los conocí como películas. La película de Matilda me encantó  y eso que ya tenía nietos, pero es que nunca he dejado de ser niña. Después conocí el blog Cuando Matilda se haga mayor  y su autora y todos sus seguidores me transmitieron la admiración que sentían por este escritor. En una de las entradas de este blog hablaban sobre la literatura infantil y  cómo había adultos a los que les daba vergüenza reconocer que leían cuentos y a otros que les daba igual lo que pensase la gente, si les gustaba un cuento lo leían aunque fuesen mayores.

Ilustración de Quentin Blake.
 Yo en ese momento estaba leyendo David Copperfield pero me daba vergüenza decirlo; creía que ese libro lo tendría que haber leído cuando era joven y no ahora. Sin embargo me di cuenta que había mucha gente mayor que leía literatura infantil y que disfrutaba haciéndolo como a mí me pasaba.  Desde ese momento pensé que leería lo que me apeteciese  cuando quisiera. Al terminar Copperfiel me decidí  a leer Matilda ya que en el blog que os he dicho siempre hablaban de ella y, además,  con muchísimo cariño.
Bien os diré que he disfrutado con esta historia muchísimo. Todos los personajes están también descritos que parece que los tienes delante cuando lo estás leyendo.
Me ha asombrado la psicología de su autor para entender el mundo de los niños sobre todo cuando leí la historia de su vida y  me enteré que  nunca trabajó en el mundo infantil.
Inmediatamente leí Charlie y la Fábrica de Chocolate y ahora empiezo con El Vicario que hablaba al revés.
En fin, estas letras son mi humilde homenaje a ROALD DAHL, un  excelente escritor que cada vez es más conocido entre nuestros niños. Espero que si alguien  todavía  no  ha tenido entre sus manos ningún cuento suyo no espere más y se decida a sumergirse en sus  libros; cuando lea el primero no parará hasta saborearlos todos. Estoy segura.

2 comentarios:

Matilda dijo...

Gracias, Conchita, por acordarte de mí a la hora de hablar de este escritor que tanto me ha enseñado, no sabes qué ilusión me hace.

¿Sabes? Hoy se escriben muchas reseñas sobre Roald Dahl, todas especiales porque él lo era, pero la tuya es más que especial. Lo has hecho con tanto cariño que creo que has demostrado con creces todo lo que transmitan sus libros. me ha gustado muchísimo leerte. Siempre me gusta pero hoy por partida doble ;)

Un abrazo muy, muy grande.

Conchita dijo...

María, gracias a tí por todo lo que aprendo cuando leo tus comentarios y críticas literarias
en tu blog.
Un besazo muy fuerte.

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